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Opinión | ¿Él, o la alcaldesa de Pitalito?

Él, supo enredar la gente. lo eligieron por su estilo culebrero, por cuestionar la inseguridad de Miguel Rico y anunciar que en su gobierno reinaría con autoridad y firmeza, aunque en algunas reuniones prefería llorar y mentir con elocuencia. Seguidor de Juan Gabriel —en ocasiones buen imitador— flaquea en el arranque de su cuatrienio. Perdió su credibilidad desde el día uno de su gobierno.

Hoy las mayorías en Pitalito reconocen que ha sido un fiasco; sin credibilidad, sin carácter y sin poder de decisión, perdió la autoridad.

Pitalito va de para atrás en materia de seguridad. En homicidios pasó de uno registrado en enero de 2019 a cinco en el mismo periodo de este año y el alcalde no reacciona. Cuatro fueron con arma de fuego y uno con arma blanca.

En materia de hurto a personas, pasó de 49 hechos denunciados en enero de 2019, a 87 en el mismo tiempo de este año.

El hurto a residencias también aumentó. De 14 registrados en enero de 2019, este año en el mismo periodo se denunciaron 16, sin dejar de mencionar las 19 motocicletas robadas en el primer mes de gobierno y otros delitos que puntean en el Valle de Laboyos.

Pitalito se volvió inseguro como su alcalde. Su forma amanerada no le ayuda mucho. Sin cuestionar su virilidad y sin querer auscultar y exponer su vida privada, parece que la de los pantalones es su esposa. Ella decide en la casa y hasta en la administración municipal, al punto que se desplaza por Neiva y Bogotá haciendo lobby en reemplazo de su esposo.

El más reciente acto de falta de autoridad de Edgar Muñoz, lo dio en el Concejo municipal. Ni siquiera los concejales de gobierno lo respetan y lo atienden. Entregado y casi entre lágrimas, optó por suplicar apoyo y respaldo a los cabildantes, perdiendo legitimidad su condición de mandatario. Como primera autoridad de policía del municipio perdió el mando. Ya ni los delincuentes lo respetan, es más, la comunidad en general tampoco lo hace. Así quedó demostrado este fin de semana tras los desmanes y ataques a botella a la policía y agentes de tránsito que intentaban realizar operativos de movilidad.

A este ritmo, dentro de poco tendrá su esposa que salir a los medios, dar los discursos y pararse frente a los concejales, porque a Edgar Muñoz Torres, le ha quedado grande administrar su municipio. Hoy, muchos no saben si en Pitalito, hay alcalde o alcaldesa.

¡Alcalde Edgar, póngase los pantalones y actúe con seguridad, pero sobre todo con autoridad.!

Apuntes:
Uno. A la presidenta del Concejo de Neiva se le viene otra investigación por la presunta venta del cargo de secretaria general del cabildo, a la abogada María Salomé Bahamón.

Dos. La lupa de las autoridades seguirá sobre la corporación Concejo de Neiva, considerando que dos concejales en ejercicio, según fuentes e información obtenida por este servidor, habrían recibido dineros para financiar sus campañas, provenientes al parecer, de actividades ilícitas.

Tres. ¿Será que el flojo gobierno de Luis Enrique Dussán sí entregará los recursos para que se construya el puente Las Delicias en Baraya? Ojalá no le mamen gallo al contratista como lo hizo Carlos Julio y “el fósforo” Henry Lizcano, quienes ya tienen investigación en Contraloría y Procuraduría por dilatar e intentar direccionar ese contrato a uno de sus amigos de turno.

Erik Puentes

Director ONDA OPITA

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