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Opinión | “La estigmatización de los papeles de Panamá”.

Está muy de moda hacer chistes flojos e inclusive ofender sobre el tan sonado caso de los “Panamá Papers”, encontrado luego de los resultados de investigación de un colectivo de ciento noventa periodistas, denominados “Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación” (ICIJ, por sus siglas en inglés) que en más de sesenta y cinco países buscan desterrar los delitos internacionales, la corrupción y abuso de poder, trabajo que se basó sobre la firma de abogados Mossak Fonseca de Panamá. —Le llamo chistes flojos u ofender por cuanto quien quiere referirse a dineros mal habidos, o quiere poner en duda el patrimonio de alguien, inmediatamente cita la hoy famosa frase o anglicismo THE PANAMA PAPERS—. Pero no necesariamente los 1.248 nombres de personas naturales y jurídicas que están en dicha lista se pueden estigmatizar; muchos de estos lo que están haciendo es aprovechar las ventajas tributarias que da la ley del país del istmo, para trasladar allí parte de sus riquezas. También puede ser para aprovechar la reserva bancaria o de identidad que ofrece un “paraíso fiscal” el cual no se puede violar hasta tanto no se declare bajo procedimiento especial y se compruebe que el titular de dicha cuenta pone en riesgo la seguridad nacional de algún estado en particular.

Las familias ricas por tradición y de apellido rimbombante en muchos países, utilizan los paraísos fiscales, a parte de la mencionada ventaja en lo impositivo para no mostrar su inmensa fortuna y por ende cuidar su integridad física o mejor, por su seguridad. Tampoco se puede desconocer que muchos otros utilizan hábilmente estos territorios para esconder las fortunas producto de la corrupción o de dineros mal habidos; mal este que no obedece solo a Colombia, ni siquiera a América, sino al mundo entero.

Pero la Fuga de capitales en sí, se debe a las políticas económicas de los países de donde son originarios los que utilizan los paraísos fiscales; unos porque el estado no les brinda seguridad, otros por lo débil de su economía o por la inestabilidad de sus gobiernos, como también por las altas cargas de impuestos que hay en sus países; y un buen número por todas las anteriores y más. De allí que las personas de la lista de los Panamá Papers obedecen a países de toda clase o escalafón económico mundial, sin que necesariamente sus riquezas sean mal habidas.

Los paraísos fiscales tienen dentro de su “menú”, la estrategia del uso y el fruto que trae consigo el manejo de estas fortunas en sus territorios, de allí que estos países sean opulentos y muestren cada día el desarrollo y progreso. Se han preguntado ustedes si los países de origen de quienes tienen cuentas en Panamá o en otros paraísos fiscales, brindaran todas las ventajas a sus connacionales adinerados o si estos dineros legales pudieran circular libremente en sus territorios, ¿cuánto sería su crecimiento económico? Claro, no faltará quien diga acertadamente que se entrará en el consabido círculo perverso que a mayor ingreso o circulante, mayor inflación; pero esto ya debe contrarrestarse con control bajo normas y políticas económicas de estado.

Se cree que en Panamá hay dinero de colombianos por lo menos en una cifra cercana a los 20 billones de dólares, y en todos los países llamados paraísos fiscales, la suma podría ascender a 100 billones de dólares de nuestros compatriotas.

Hay dos maneras de ver el mundo: la primera es ser competitivo y la segunda es ser impositivo (digamos que Colombia está en esta última) y hay una guerra entre los países abiertos como Panamá, que está creciendo a un ritmo anual del 6%, y países impositivos que quieren implantar más y más impuestos a sus empresas y ciudadanos, lo que seguramente “invitará” a que se saquen más dineros de estos territorios hacia los paraísos fiscales. Otro caso en concreto es El Principio de Territorialidad de la Ley Fiscal panameña, que permite que las sociedades anónimas de responsabilidad limitada o de cualquier otra naturaleza, cuyas rentas y ganancias provengan exclusivamente de actividades extraterritoriales, no paguen impuestos en Panamá, siendo consideradas offshore.

En Colombia por iniciativa del congresista Huilense Rodrigo Villalba, se tiene programado para el 8 de junio en el Senado, hacer un debate a todos aquellos políticos que aparecen en la famosa lista, para conocer las respuestas del porqué están utilizando paraísos fiscales que esconden sus fortunas; no digo de dónde sacaron sus riquezas, dado que eso corresponderá al ente investigador, revisar sus declaraciones de renta y demás, para ver si estos han tenido un injustificado incremento patrimonial.

Con los paraísos fiscales lo que se busca es dinamizar la economía de estos países como una de las medidas para su crecimiento económico, pero no faltará quienes a la sombra ejerzan actividades “non santas” y logren poner a circular en estos, sus inmensas fortunas. Pero un principio del derecho dice muy claro, “se es inocente hasta que se demuestre lo contrario”.

¡Hasta la próxima!

Por: Ricardo Alonso Puentes
@ricapul

Ricardo Alonso Puentes

Nacido en Rivera (Huila), residente en Santiago De Cali - Administrador de Empresas, Abogado, Especialista en Finanzas, Periodista deportivo de la Universidad De Rosario de Argentina. Comentarista de Onda Gol - Alfa estéreo 107.8 FM.

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